Reseña de “Ant-man y la avispa” (05-07-2018)
- Javier Valladolid
- 5 jul 2021
- 2 Min. de lectura
[Miniverso y arresto domiciliario]
[Aviso de spoilers]
Ayer vi “Ant-Man y la avispa”, la nueva película del universo Marvel, secuela de “Ant-Man”, dirigida por Peyton Reed y guionizada por Chris McKenna, Erik Sommers, Andrew Barrer y Gabriel Ferrary. Me ha parecido una película bastante graciosa, sin llegar al nivel de la primera, y con una profundización en los personajes y en el tema del mundo cuántico. Le pongo un 7,1.
Tras el incidente de Alemania, con Scott Lang/Ant-Man (Paul Rodd) en el equipo del capitán América, le ponen en arresto domiciliario con una cadena al pie, con dos años que están a punto de finalizar. A su vez, Hope/The Wasp (Evangeline Lilly) y su padre Hank Pym (Michael Douglas) Pym están en busca y captura, y se le prohíbe a Scott cualquier contacto con ellos. Todo parece ir bien hasta que Scott tiene un sueño donde ve en el mundo cuántico a Janet Van Dyne (Michel Pfeiffer), la madre de Hope, justo cuando abren un túnel cuántico para poder viajar allí, encontrarla, rescatarla y regresar.
La película tiene una estructura bastante parecida a su predecesora “Ant-Man”, aunque comparte cronología con las nuevas películas de Marvel justo antes del final de “Infinity War: Parte 1”. Vemos una mezcla de tramas que giran alrededor del laboratorio de los Pym, con Dawn/Fantasma (Hannah John-Kamen) buscando el acceso al miniverso, como llaman al mundo cuántico, para solucionar un problema de cuenta atrás o Sonny Burch (Walton Gonnins), quien quiere el laboratorio, que se miniaturiza y lleva cual mochila, para vender su tecnología.
Salvo por el tema del miniverso y lo correspondiente a Ant-Man y La Avispa con los cambios de tamaño y cuestiones cuánticas, estamos ante la típica película de ladrón buscado por la justicia, encarnada en Paxton (Bobby Cannavale), otros ladrones que quieren hacerse con el botín. Retoma su especial carga cómica Luis (Michael Peña), la escena del suero de la verdad es divertidísima, y continuará el tema social laboral con su empresa de seguridad junto a los otros amigos de la película previa. Tampoco faltan los momentos hormiga, aunque medio repetidas. Y la emoción desde la hija de Scott y los padres de Hoppe, mientras que la trama de Dawn va ligada a la culpa y a la necesidad de ayuda.
En conclusión, la repetición de esquemas hace una película que podía dar para más, pero que entretiene mucho como comedia y hace pensar en algunas cosas gracias a su inmersión en lo emocional de la aventura del mundo cuántico o miniverso.
Comments